Sin lugar a dudas, el factor más importante en el rendimiento de un ventilador de techo es su diámetro, o mejor dicho, la longitud de las aspas. A mayor longitud de aspas, mayor superficie de éstas y por lo tanto mayor será también el volumen de aire movido. Ten presente que un ventilador grande girando despacio consume menos y es más silencioso que uno pequeño girando rápido. Por lo tanto, nuestro consejo es que optes siempre por el ventilador más grande que sea posible.

Un mayor diámetro de ventilador requerirá también un motor más potente. Precisamente, el motor es una de las piezas clave de un ventilador. Un motor de calidad y bien dimensionado no hará ruido ni se sobre calentará, y será capaz de suministrar la potencia necesaria con comodidad. Esto hará que dure muchos años.

El periodo de garantía del motor que ofrece un fabricante puede ser un buen  indicador de la calidad de éste. Hay marcas que ofrecen 2 años, otras 15 y otras hasta una garantía de por vida. Normalmente el motor es el componente más costoso del ventilador, por lo que también es aquí donde los fabricantes intentan ahorrar costes. Por este motivo, la diferencia en precio de un fabricante a otro se refleja principalmente en la calidad y la correcta especificación del motor. 

En tercer lugar, nos encontramos con la posición del ventilador dentro de la habitación. El efecto de un ventilador de techo se notará principalmente debajo de éste.  La velocidad del aire es máxima en el centro de la pala, y disminuye rápidamente -y por lo tanto también su poder de climatización- a medida que nos alejamos de ésta. Por esta razón es recomendable instalar el ventilador justo encima de la zona donde se encontrarán las personas -por ejemplo, encima del sofá- y no simplemente en el centro de la habitación. Por otro lado, si montamos el ventilador muy cerca del techo -sin tija- también obtendremos una menor eficiencia.

La instalación también debe hacerse, a ser posible, en el techo de origen, y no en un techo falso. Esto evita una posible amplificación de las vibraciones y el ruido.

El ángulo de inclinación de las aspas o "ángulo de ataque" también es un parámetro decisivo en el diseño del ventilador. De su valor depende el caudal de aire que genera el ventilador, el consumo, la eficiencia y el nivel de ruido, por lo que un buen fabricante lo determina con sumo cuidado.

Continuando con las aspas, su material y perfil aerodinámico influyen también en la eficiencia del ventilador, y son factores que se determinarán durante el proceso de diseño del ventilador. Las aspas deben estar fabricadas con un material duradero y estable, que no se doble fácilmente por presión o humedad. El perfil de las aspas suele ser plano en los modelos más económicos, mientras que en los de gama alta suele tener una curvatura progresiva.

Finalmente, hay que mencionar el número de aspas. En un ventilador de techo doméstico el efecto del número de palas es inapreciable, por lo que éste es básicamente un parámetro estético.

Ventiladores de techo silenciosos con motor DC: